La emergencia se da justo el año en que el Gobierno nacional eliminó la gratuidad de la vacuna contra la fiebre amarilla. Sobre esto Nicolás Kreplak, ministro de Salud bonaerense, afirmó que “la vacuna se suspendió con una mirada medio infantil y reduccionista, que es que si te podés pagar un viaje a Brasil, entonces te podés pagar la vacuna”.
El funcionario comentó, en declaraciones a Radio Provincia, que “la fiebre amarilla, la misma de aquella época de la epidemia, sigue existiendo, pero ahora está más circunscrita a territorios más selváticos. La zona más endémica es la del Amazonas y algunos países de Centroamérica”.
Monos aulladores infectados
El ministro señaló que “este año estamos viendo un aumento de casos. Hay una suba de no sólo de la cantidad de monos infectados sino también de personas que se han infectado en la zona de Brasil y otros países de la región”.
Kreplak resaltó que “es una enfermedad con una altísima mortalidad, cercana al 42%. En nuestro país no se registran casos desde el año 2007 pero sí tenemos este año la aparición de monos aulladores en la zona de la selva de Misiones y Corrientes que se han infectado. Y eso es un indicador de la posibilidad de riesgo”.
Mirada reduccionista
El funcionario relató que “hay una vacuna que se da una vez en la vida, que es la vacuna de fiebre amarilla, que siempre se daba en distintos hospitales a las personas que viajaban a zonas de riesgo. Porque si uno viaja y trae el virus en su sangre, el mosquito podría picarlo y transformarse en una transmisión urbana, lo cual sería una catástrofe. Así que para eso es que se da la vacuna, no solo para cuidar al que viajaba sino para cuidar a toda la comunidad”.
Kreplak lamentó que “este Gobierno decidió suspender esa vacunación con una mirada medio infantil y reduccionista, y por supuesto todo lo contrario al sanitarismo: si te podés pagar un viaje, suponiendo que la gente solo se va a Brasil a la playa de vacaciones, entonces te podés pagar la vacuna. Esto demuestra un desconocimiento tremendo, pero además se pone en riesgo al resto de la comunidad que no se fue de vacaciones a Brasil”.
“Además”, continuó el funcionario, “ni siquiera tiene un sentido de ajuste económico muy grande, porque es una vacuna que se aplica muy poco”.
“Ahora tenemos vacunas, el año que viene no sé”
Por ello, “ahora no se consiguen vacunas ni siquiera en el sector privado, porque en general es una vacuna que nunca nadie hizo para este sector y se vendía muy poco. Entonces los laboratorios, si no tienen la orden de los países de comprar vacunas, hacen que no estén disponibles. Realmente se ve todo el tiempo un nivel de improvisación que asuste y que preocupa”.
De todos modos, reconoció el ministro Kreplak, “este año en la provincia tenemos vacunas, a partir del año que viene no sabemos”. Y cerró con un llamado a “votar bien el fin de semana, porque la verdad que lo que hay que hacer es tratar de evitar tener un Gobierno que desprecie la salud pública”.