La ola de frío polar que se reporta en todo el territorio argentino se cobró al menos tres vidas en las últimas horas: se reportaron al menos tres muertes en distintos puntos del país a causa del frío. Se trata de dos hombres de Paraná y Mar del Plata, ambos en situación de calle. Además, en Catamarca, se encontró el cuerpo de un recién nacido abandonado. Los tres fallecimientos se habrían producido por hipotermia.
El inicio de este crudo invierno, además, afectó a varias familias por el llamado “asesino silencioso”: el monóxido de carbono. Este martes murieron cinco personas en una casa del barro porteño de Villa Devoto, cuatro adultos (de entre 79 y 42 años) y una nena de 4 años. Además, un bebé fue trasladado de urgencia al hospital. La hipótesis principal de los investigadores es que la causa de los decesos fue una intoxicación por este gas peligroso. La situación fue advertida por un familiar que llamó al 911 y abrió las puertas para ventilar.
En tanto, en las últimas horas se conocieron otros cinco casos de muerte por inhalación de monóxido de carbono. En Maipú, Mendoza, una mujer de 47 años y su hijo de 14 fallecieron tras utilizar un brasero durante la noche. En Mar del Plata, en tanto, murieron un hombre y su sobrina, aparentemente por un desperfecto en el calefón. Y en Entre Ríos, la víctima fue una chica de 14 años, que estaba en una habitación con un brasero.
El monóxido de carbono se genera por la combustión incompleta de gas natural u otros productos que contienen carbono. Es inodoro, incoloro e insípido, lo que lo vuelve particularmente peligroso: no se percibe ni da señales evidentes, y puede atacar sin previo aviso mientras las personas duermen o realizan actividades cotidianas.
Los principales síntomas por intoxicación por monóxido de carbono son: dolor de cabeza, mareos, somnolencia, debilidad, cansancio, náuseas/vómitos, pérdida del conocimiento y/o convulsiones, palpitaciones, dolor de pecho y hasta paro cardiorrespiratorio. (DIB)